SERPIENTE
En los países cristianos la serpiente conlleva una carga
negativa, no ocurre así en otras culturas donde este animal era
venerado por sabiduría, sagacidad y fuerza de voluntad. La serpiente
disfruta de la vida, es sentimental, agradable, bella y tienen sentido
del humor. Les gusta vestirse ostensivamente pero con elegancia, les
encantan los accesorios.
Son
de pocas palabras, reflexionan profundamente antes de hablar, son
buenos filósofos, y buenos consejeros, cuentan con una notable
intuición con dotes de clarividencia si la cultivan, su sexto sentido
les falla en pocas ocasiones.
No soporta el fracaso, su firme determinación le hace concluir todo
lo que empieza, toma con rapidez sus decisiones, este es un punto a
favor para adelantarse al resto del grupo que confían al verla tan
tranquila enroscada en sus pensamientos. Por el contrario el juego le
gasta malas pasadas.
Es
bastante posesiva con los que le rodean, acude cuando le piden ayuda,
pero en su afán de protección se enrosca alrededor del protegido
olvidándose por completo de sí es amigo o víctima, los resultados
pueden ser nefastos.
Buena
trabajadora, puede dedicarse sobre todo a gestión de empresas, está
en la cúpula del organigrama como cabeza pensante, aunque ocupe
lugares de menos responsabilidad siempre se tiene en cuenta lo que
dice.
Aunque
no le gusta atesorar el dinero, dispone de el por su capacidad de
ahorro, también ejerce de prestamista, pero como en el caso anterior
puede ahogar a aquellos que aceptan hacer tratos con ella.
Celosa
en grado sumo en sus relaciones de pareja, no permite ningún desliz,
pero a ella le gusta ir de caza en busca de aventuras. Madre prolífica,
le encanta rodearse de las crías protegiéndolas de cualquier
depredador.